Si el saber es arrogante
¡me jacto de que no sé!
en mucho soy ignorante
¡pero yo me tengo fe!
La sabiduría alabo
cuando esta se muestra humilde
sea el saber de Matilde
sea el saber de don Gabo.
Pero si me viene un cabo
que se insufla comandante,
se me quita lo aspirante
teniendo que aprender mucho
doy media vuelta y no escucho
si el saber es arrogante.
Como no soy erudito
la sapiencia me hace falta
cuando la duda me asalta
con certeza estoy contrito.
Para aprender necesito
que me digan el por qué
y aunque rodeado yo esté
de expertos en la enseñanza,
si es que mi saber no alcanza
¡me jacto de que no sé!
Quizá sea una burrada
pero lo digo a mi modo:
Aquel que lo sabe TODO
desconoce de la NADA.
Y sé de gente ilustrada
de vanidoso semblante
que con un trato atorrante
se siente un ser superior
y al lado de este señor
en mucho soy ignorante.
Para asimilar lo avieso
de la gente con cultura
tengo la cabeza dura
y el espíritu travieso.
Por ignorante confieso
¡no sé la hora del té!
y a las charlas de café
nunca les rindo tributo
pueden decir que soy bruto
¡pero yo me tengo fe!
© 2005 Luis Bárcena Giménez
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