¡Es necesario que pongas
esfuerzo para enmendarte!
¿crees tú que hay que rogarte
para que bien te compongas?
Te enviciaste con la coca
¿fue por sonso o fue por vivo?
y a mi hogar por tal motivo
caíste como una roca.
Y plata gasté no poca
con tal de que te repongas,
No me vengas con milongas
deja tu mísero escombro
pues para tu bien, el hombro
¡es necesario que pongas!
Por más que te digo yo:
- ¡con la coca es hasta aquí!
en el día, dices ¡sí!
en la noche, dices ¡no!
Ya robaste al que te dio
la mano para ayudarte,
has sabido propasarte
con el vicio, hasta ser ducho
¡y tú tienes que hacer mucho
esfuerzo para enmendarte!
De entre personas aviesas
que también están en eso
fue brillante tu regreso
con todas las fibras tiesas.
Y sin vergüenza confiesas
que no puedes aguantarte,
¡me dan ganas de matarte
tú andas de mal en peor!
¿para que vivas mejor
crees que hay que rogarte?
Y si ahora yo me excuso
es para frenarte el tranco
porque del vicio a lo franco
tú quieres estar recluso.
Ya me parece un abuso
que de mi tiempo dispongas,
Si te animo, me rezongas
y si no, sueles buscarme
¿tengo yo que arrodillarme
para que bien te compongas?
© 2005 Luis Bárcena Giménez
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