en Décima Espinela

Ser chola de Chulucanas



Ser chola de Chulucanas
en todo sitio está bien
lo que está ¡hasta el cien!
ser fea ¡pero con ganas!


Nacer en la capital
o en un pueblo de la Sierra
no debe servir de guerra
como de odio irracional.
En ámbito nacional
abundan lindas paisanas,
que se acaben las macanas
pues solo causan barullo
ya que es motivo de orgullo
ser chola de Chulucanas.


Cuando un necio vapulee
algún lugar por remoto
hay que mostrarle una foto
para que así se maree.
Es justo que uno recree
en su terruño el edén,
de la Costa al Pajatén
con su belleza sin par
de Chulucanas hablar
en todo sitio está bien.


Lo malo es cuando una china
emigra y se hace exquisita
y al volver a su aldeita
mira mal a su vecina.
Y hay que explicarle a la “fina”
que se ve malo también,
despotricar del culén
por alabar el jerez
y ser chola racista, es
lo que está ¡hasta el cien!


Algunas se dimensionan
sin permiso del espejo
y pa’ lucir su pellejo
todo el cuerpo contorsionan.
¡Franco que a nadie impresionan
con posturas palanganas!
y en reino de las bacanas
¡donde una, vale por dos!
no tiene perdón de Dios
ser fea ¡pero con ganas!

© 2005 Luis Bárcena Giménez

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