No te pases de sabido
ni vengas a impresionar
¡cómo tú vas a mandar
si nunca has obedecido!
Con tu charla me mareo
con tu pausa me adormezco
con tu forma me enloquezco
con tu fondo me mosqueo.
¿A qué viene el parloteo
y la pose de aguerrido?
sin haberlo merecido
se te ha otorgado un chance
pero controla tu alcance
no te pases de sabido.
Un esfuerzo cotidiano
que realices te aconsejo
para que todo el pellejo
puedas tener más liviano.
Con agua fría temprano
una ducha te has de dar
y desde tu dulce hogar
donde puede ser que valgas
tú con ínfulas no salgas
ni vengas a impresionar.
Ahora quieres ser el guía
el líder, el mandamás
cuando poco tiempo atrás
eras holgazán y espía.
Tu creencia de la mía
completamente es dispar
dado tu modo de actuar
estuve reflexionando
si no tienes don de mando
¡cómo tú vas a mandar!
Si el que está en la cabecera
de la empresa, cree en ti,
que él te crea, mas pa’ mí
no eres ninguna lumbrera.
De tu persona altanera
no saco ningún partido
y te digo por creído
aunque irrespeto parezca
no pidas que te obedezca
¡si nunca has obedecido!
© 2007 Luis Bárcena Giménez
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