en Décima Espinela

Teniendo tu compañía



En un mundo atolondrado
falto de fe y alegría
vivo feliz y calmado
teniendo tu compañía.


El loro aprende la guasa
el gallo canta a deshora
la perrita se acalora
y el perro ladrando pasa.
El ratón entra a la casa
y el gato sube al tejado
las mascotas y el ganado
ya de nada se cohíben
pues entienden de que viven
en un mundo atolondrado.


El animal no se queja
puesto que no puede hablar
pero este mundo ¡poblar!
el instinto le aconseja.
El burro para la oreja
mas no rinde pleitesía
excepto en la cacería
a las bestias ¡igual da!
y solo el humano está
falto de fe y alegría.


Yo no estoy indiferente
a lo que pasa en el mundo
como el mundo está iracundo
me escabullo de la gente.
Lo peor es ser inocente
y encontrarse involucrado
por todo lo que he andado
del hogar yo soy amigo
y es por esto que contigo
vivo feliz y calmado.


Tú me tratas con ternura
das importancia a mis temas
y cuando surgen problemas
no pierdes la compostura.
Y para que estés segura
que aceptamos tu valía
mi corazón con porfía
repica como cencerro
y mueve la cola el perro
teniendo tu compañía.

© 2007 Luis Bárcena Giménez
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