Neuronas tuve un cardumen
con tus redes lo agotaste
y en la playa me dejaste
¡qué tan falto de cacumen!
Qué magníficos instantes
con la musa yo vivía
pues esta siempre venía
desde sitios muy distantes.
Escribía rápido antes
que las ideas se esfumen
con el poético numen
mis poemas realizaba
y puesto que las usaba
neuronas tuve un cardumen.
Como también tuve fe
en tu amor y compromiso
pero tú sin mi permiso
al recelo diste pie.
Por tu iniciativa de
marinera te alistaste
junto al celo te embarcaste
y estando en el mar mi amor
vulnerable al resquemor
con tus redes lo agotaste.
Qué gran equivocación
tuve por tu payasada
ni celos, ni amor, ni nada
¡todo fue simulación!
Experta en navegación
a tu vida retornaste
cual un muñeco me usaste
demostrando no ser lerda
me diste un poco de cuerda
y en la playa me dejaste.
Tú eres de aquellas tramposas
que aunque lejos haces fiero
pues a pesar que no quiero
con tu recuerdo me acosas.
En mi cerebro otras cosas
aumentaron de volumen
hoy las dudas me consumen
porque en ellas me concentro
por mi madre que me encuentro
¡qué tan falto de cacumen!
© 2007 Luis Bárcena Giménez
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