en Décima Espinela

Mi meta es una mujer



Mi meta es una mujer
del campo la más hermosa
tiene perfume de rosa
pero espina su querer.


A todos alguna vez
al mirar a una belleza
nos da dolor de cabeza
y se nos mueve la nuez.
Estoy en la madurez
de la vida y del poder,
llegó la hora de tener
un gemelo corazón
porque soy todo un varón
mi meta es una mujer.


Hace tiempo que en la mira
una fémina silueta
con su belleza completa
un dardo de amor me tira.
Ser el aire que respira
y el tibio sol que la acosa
ruego en noche tormentosa
en que reinan los placeres
si es de todas las mujeres
del campo la más hermosa.


Yo vivo de ella pendiente
y ella sabe y no lo evita
es una diosa que invita
a contemplarla silente.
Es una bella durmiente
cuando en la tarde reposa,
no hay nadie más glamorosa
como la más admirada
y esta dama delicada
tiene perfume de rosa.


La mujer que a mí me gusta
con su genio imprevisible
puede ser lo más sensible
o dura como la fusta.
Este su accionar me asusta
sin que pueda comprender,
con esa forma de ser
hasta el sueño ella me quita
es la rosa más bonita
pero espina su querer.

© 2004 Luis Bárcena Giménez

0 comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por su comentario, se mostrará cuando sea aprobado.