Jacinta tiene una pena

Jacinta tiene una pena

pero no en el corazón

es en la parte morena

donde le ajusta el calzón.

Junto a su árbol de guarango

Malena alegre cantaba

y el chancho que ella cebaba

se revolcaba en el fango.

Con melodía de Tango

esto cantaba Malena:

- Jacinta que ya no es nena

por mucho que haga su finta

tiene una pena Jacinta

Jacinta tiene una pena.

Al ver gente en el corral

y haciéndose la loca

bien fresca se fue de boca

a esa hora matinal.

Y agregándole su sal

a Jacinta ¡con sazón!

dijo que esta en su razón

y pa’ que no se le abulte

pidió al doctor que la ausculte

pero no en el corazón.

Y en el centro de la rueda

que le forman las curiosas

deja caer ciertas cosas

tan suave como la seda.

Ante preguntas sin veda

pues son de la vida ajena

divulga de forma amena

y con pelos y señales:

- donde se encuentran sus males

es en la parte morena.

Un hondo suspiro da

después de leer sus mentes

- ¡ay, paisanas, qué impacientes!

dice como quien se va.

- ¡Frío!, si piensan que está

como una rosa en botón,

está igual que champiñón

lo digo con mucho tacto

pues es el lugar exacto

donde le ajusta el calzón.

© 2005 Luis Bárcena Giménez