en Décima Espinela

A semejanza de un palo



Dije que estaba parado
a semejanza de un palo
y tú pensando en lo malo
seguro que te has mojado.


Tú me obligas Libertad
a que repita otra vez
para pensar lo que no es
dañando mi honestidad.
Tengo una íntima amistad
en un sitio camuflado
y hablando de mi estimado
elemento servicial
de forma confidencial
dije que estaba parado.


Yo pasaba cuando ¡justo!
él la cabeza movía
y qué contraste el que hacía
con un portalón vetusto.
Estaba allí por su gusto
y no por un varapalo,
pa’ la vista era un regalo
y por tener estatura
se veía su figura
a semejanza de un palo.


Del femenino hospedaje
alguien le mostró una teta
su cabeza a la bragueta
la bajó de un solo viaje.
Vi que él tenía un pelaje
en esa parte muy ralo
y es así como Gonzalo
en la calle estaba erecto,
yo estoy hablando correcto
y tú pensando en lo malo.


Y no digas ¡ay, por Dios,
ya no se puede contigo!
y no busques un testigo
que solo estamos los dos.
¡Un momento, que entre nos
yo no soy el mal pensado!
del palo me has preguntado
yo he respondido a tu duda
y en esa cosa peluda
seguro que te has mojado.

© 2007 Luis Bárcena Giménez

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